Marco G.
Estratega de Crecimiento Digital (Growth), llevo 14 años viviendo 100% de internet desarrollando negocios exitosos.
Hoy en LinkedIn me encontré una propuesta superinteresante de una organización que buscaba una agencia de marketing digital. Al revisar su web, encontré errores críticos fundamentales que me preocuparon, por lo que puse manos a la obra para detectar puntos de mejora y me inspiró a construir esta guía para establecer criterios de calidad en la compra de una web para un consumidor.
A continuación, te presento una lista de actividades que puedes hacer como consumidor para evaluar a un desarrollador para tu sitio web sin tener que ser un experto técnico, con herramientas que puedes usar gratis y mejorar así tu decisión de compra.
Esto es lo primero que hay que preguntar al mandar a hacer una web, y te explico por qué. Hoy en día, las agencias y proveedores particulares del servicio usan WordPress para montar una web en minutos y después utilizan un constructor de sitios web para darle forma de acuerdo a la marca del cliente.
“WordPress es una plataforma de código abierto y gratuito que permite crear webs en minutos.”
El problema no es WordPress ni los constructores prefabricados, sino la dependencia técnica que causan. Un sitio con puntuaciones bajas en Lighthouse va a reducir la experiencia de usuario y, con ello, ocasionará que abandonen la web antes de tiempo, por lo que las campañas publicitarias (sean orgánicas o de paga) van a reducir su rendimiento.
“Lighthouse es un kit de herramientas que permite medir intuitivamente el rendimiento de una web.”
Los esfuerzos de adquisición de ventas son costosos. Los usuarios responden de acuerdo a la velocidad, diseño y experiencia que brinda el sitio web, a peor rendimiento, peores conversiones y más gasto publicitario.
La agencia te puede vender un sitio en WordPress; de hecho, puede darnos beneficios increíbles para que las organizaciones tengan la capacidad de autogestión. Pero la agencia debe enseñarte proyectos similares con buenas puntuaciones en Lighthouse.
Para este caso, vamos a asumir que lo único que buscas es un sitio web que refleje tu institución y un par de formas de contacto, ya que si no definimos bien lo que buscas, un desarrollo podría volverse complejo de evaluar. La pregunta clave aquí es: ¿La administraremos nosotros?
Si no cuentas con un especialista técnico, los desarrollos en código son complejos de administrar y susceptibles a errores. No obstante, con un buen desarrollador, tendrás una de las experiencias más fluidas, que permite alcanzar los mejores puntajes de Lighthouse y optimizaciones para mejorar el rendimiento de campañas que no se pueden lograr con WordPress.
De nuevo, para poder revisar qué tan bueno será el desarrollo, no basta con que el trabajo del desarrollador sea agradable a la vista. Si el rendimiento de tu web está comprometido, esto afectará el desempeño de las campañas de pago u orgánicas que lleves a cabo.
Como habrás notado ya, hemos hablado sobre rendimiento, y es que es una de las métricas principales que influyen en la experiencia de usuario y, con ello, incrementa o reduce los niveles de conversión de las campañas donde decidas invertir. Veamos cómo revisarlo de forma intuitiva sin ser un técnico.
No voy a entrar en detalle técnico, pero esta herramienta la ha creado Google para medir la viabilidad técnica y de desempeño de los sitios web. Solamente ingresa el enlace de un sitio web y tendrás una puntuación global tanto en teléfonos como en escritorio.
Puedes acceder a la herramienta en:
Generalmente, un sitio web puede caer en el rango mayor a 80 y es aceptable como compra, ya que no siempre es posible tener una calificación de 95+ porque depende de las funcionalidades del sitio web mismo. Tener buenas calificaciones aquí garantiza una base sólida para el rendimiento técnico de un sitio web, por lo que los usuarios, al abrirlo, tendrán la certeza de recibir un contenido bien estructurado y de rápido acceso.
“Todos mis desarrollos tienen al menos 90 puntos en Lighthouse, porque valoramos la experiencia de usuario.”
SEO significa Search Engine Optimization (Optimización para Motores de Búsqueda). Estas optimizaciones nos permiten revisar si nuestra web estará preparada para aparecer en Google, pero con matices. Esta es una pregunta que tiene su truco, y dependiendo de la respuesta del desarrollador, deberás modular la confianza que tienes. Por lo que debes estar muy pendiente de qué es lo que te prometen.
“Si te dicen que tu web estará en las primeras posiciones de Google sin pagar, es una señal de alerta.”
Si te prometen esto, es un indicador que debería alejarnos de la compra. La única forma de tener las primeras posiciones en un motor de búsqueda es pagando por publicidad. Si te prometen no tener que pagar, bueno, ya sabes la respuesta. Lo que esperas es una respuesta honesta por parte del creador del sitio web.
Este es posiblemente uno de los factores más importantes para la velocidad de una web, porque dependiendo de la calidad del servidor, será la velocidad de respuesta de tu sitio. Lo ideal es que tu web cargue en menos de 1,5 segundos. Preferiblemente, pide referencias de los sitios web de otros clientes y visítalos alrededor de la 1 de la tarde de tu hora local. ¿La web carga en menos de 1,5 segundos? Si no es así, es una bandera roja, ya que, de nuevo, el rendimiento influye en los niveles de conversión.
“Como observarás, de nuevo analizamos algo relacionado con el rendimiento.”
Ahora que ya estás cerca de la toma de decisión, la web tiene un buen rendimiento y estás satisfecho con el estilo de diseño, nos resta definir un punto crucial. Porque incluso aunque adquieras un sitio web hecho en WordPress, necesitas evaluar qué vas a hacer con la administración. Aquí vamos a abordar varios puntos administrativos cruciales para evitar conflictos de propiedad y que te ahorrarán dolores de cabeza o gastos que no tenías contemplados.
“Un buen desarrollador o agencia no desaparece después de recibir el pago final.”
Es fundamental que tengas la propiedad o, como mínimo, el control administrativo total de tus activos digitales. Asegúrate de que el dominio y la cuenta de hosting estén registrados a tu nombre o al de tu empresa. Un proveedor que insiste en mantener todo a su nombre puede, en el peor de los casos, 'secuestrar' tu web si la relación termina. Pide que las credenciales de administrador te sean entregadas al finalizar el proyecto.
Una web, especialmente en WordPress, necesita mantenimiento para seguir siendo segura y funcional. Los plugins, temas y el propio núcleo de WordPress se actualizan constantemente para corregir vulnerabilidades.
Una vez que la web esté en tus manos, querrás hacer pequeñas modificaciones: cambiar un texto, subir una nueva foto, publicar en el blog. Un buen socio te capacitará para que seas autónomo en las tareas del día a día y te ofrecerá un canal de soporte claro para problemas técnicos o cambios mayores.
“Considera el mantenimiento web no como un costo, sino como un seguro.”
Tener un sitio web va más allá de tener un espacio que luzca bien y refleje tu marca. Si perdemos de vista el aspecto del mantenimiento o el rendimiento técnico, podemos, a largo plazo, arruinar las oportunidades de nuestro negocio para crecer en el mundo digital.
Esto haría que nuestra inversión incluso se convierta en pérdidas de capital y tiempo. En el mejor de los casos, solo será el gasto del sitio web, pero una mala decisión dentro de este activo digital puede arruinar nuestras campañas de pago o la imagen de nuestra organización ante nuestros clientes.
Permíteme construir el sitio web que necesita tu negocio para crecer en Internet. Conversemos tus inquietudes y planifiquemos en 15 minutos las oportunidades que tiene tu negocio para crecer.